La liberalización
del servicio postal ha abierto un mundo de posibilidades a empresas que quieran
adentrarse en un nuevo mercado. Para los centros
especiales de empleo, ésta liberalización he permitido la creación de
puestos de trabajo para personas con diversos grados de discapacidad.
Los
servicios que pueden ofrecer las nuevas operadoras postales son muy variados,
ya que distribuyen todo tipo de formatos que se generan en una imprenta,
tales como folletos publicitarios, flyers, dipticos o tripticos, aparte de la
correspondencia clásica por supuesto.
Hoy día
casi nadie envía cartas escritas a mano por correo, salvo en navidades o en
acontecimientos especiales. Los carteros de la actualidad distribuyen, aparte
de las odiadas facturas, todo tipo de documentos empleados en campañas de
marketing directo, o marketing promocional.
Ésta acción
de incluir documentación publicitaria personalizada para cada destinatario
recibe el nombre de mailing,
y si se realiza correctamente puede ser una gran vía de comunicación con los
clientes. De todos los procesos que conlleva la elaboración de una exitosa
campaña de mailing se encargan en centros especiales de empleo, dando trabajo a
un importante número de personas.
Una tarea
importante en toda campaña de marketing directo es el ensobrado. A la hora de ensobrar
todos los elementos que componen el mailing, hay que poder seleccionarlos de
antemano siguiendo unos criterios que se adapten al perfil de cada destinatario.
Ahí es donde entra en juego la base de datos.
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